Ya hemos platicado mucho en este blog sobre los tipos de té que obtenemos de la planta Camelia Sinensis. Hoy vamos a profundizar más sobre el té negro, su origen, procesos y beneficios.
Para crear esta bebida, su planta ha sido procesada de formas muy particulares. Lo que lo convierte en té negro y lo diferencia de los demás (té verde, té blanco, té oolong), es el proceso que se lleva a cabo en sus hojas y el tiempo de oxidación que es la clave para obtener ese sabor intenso.
Historia
Todo empezó en el siglo XVII en un cargamento que venía de China a Inglaterra. Cuando comercializaban las hojas de Camelia Sinensis para prepararlo en Occidente. El té negro se descubrió por coincidencia, porque los traslados desde el Oriente tardaban hasta meses en llegar. Al llegar a su destino, la planta había cambiado su aroma y color porque se había oxidado. El poco oxígeno que tenía, la hizo más oscura y por eso la llamaron Té negro. Estas hojas eran carísimas entonces no era opción tirarlas y la gente empezó a tomarlas aunque estuvieran diferentes. Y así empezamos a tomar Té negro.
Consumir el té se volvió un rito que daba estatus y posición social. Por su alto precio, solo era para consumo de la realeza y clase alta de Reino Unido. Después se fue popularizando hasta convertirse en la bebida que es hoy.
El té negro se produce principalmente en China, India y Sri Lanza. Después entraron en el mercado Vietnam, Nepal y Turquía en producciones más chicas.
La oxidación
El proceso para llegar hasta el té negro está conformado por cuatro pasos fundamentales: marchitar, enrollar, oxidar y secar.
Las hojas verdes de su planta se extienden para que comience su proceso de marchitación. Posteriormente se enrollan,ya sea manualmente o con máquinas especiales. Esto es para darle la forma característica para infusionar. Y así es como podemos reconocer un té de calidad.
En el tercer paso las hojas ya enrolladas son llevadas a ambientes húmedos para una doble función: fermentar la hoja y al mismo tiempo oxidarla. En el caso del té negro este proceso dura hasta 24 horas.
Y por último, se elimina la humedad que se agregó para fermentar y oxidar. El secado, en algunos lugares de China sigue un proceso muy artesanal. Este método consiste en colocar las hojas en recipientes al aire libre sobre fuego hasta que estén listas. Otra técnica menos tradicional es hornearlas o pasarlas por túneles con aire caliente.
Su sabor
El té negro tiene un sabor más fuerte y amargo por su tiempo de oxidación y proceso de secado. Y la fermentación le da notas más ácidas que el resto de los tés. Puedes saber si tu té se secó de manera artesanal si percibes notas ahumadas. De otra manera, se van a conservar mejor los sabores de la fermentación.
Beneficios
En comparación con otros tipos de té, el negro tiene minerales como zinc, calcio, hierro, flúor y magnesio. También es un fuerte antioxidante.
Por su tiempo de oxidación, contiene mayor teína que las demás variedades. Si lo comparamos con una taza de café, el té negro contiene el 20% de su cafeína. Por esto, es mucho menos agresivo que el café y puede ayudarte a despertar pero sin acelerar tu corazón.
Té Negro Orange Pekoe
Nuestro té negro es el Orange pekoe. Los tés negros son procesados después de 2 maneras, CTC o el método ortodoxo. Nuestro té negro es procesado por el método ortodoxo.
Las hojas de té marchitas se enrollan fuertemente ya sea a mano o mecánicamente mediante el uso de una tabla de laminación cilíndrica. El proceso produce una mezcla de hojas enteras y rotas, que son clasificadas, ordenadas, oxidadas, y secadas.
Grado del té
La posición más alta de calidad la ocupan las hojas enteras, seguidas de las hojas rotas, los trozos, y el polvo de té. Las hojas enteras se producen manteniendo la hoja intacta. Las hojas enteras son consideradas ampliamente como el té más valioso y de mejor calidad, especialmente si contiene brotes.
Les hicimos una imagen para que puedan ver los grados de una forma mucho más clara. Ahí pueden ver que nuestro té negro Orange Pekoe es el segundo de arriba hacia abajo. Lo que demuestra su calidad.
Infusión
Se recomienda usar 2.25 gramos de té para una taza de 180 ml. Aproximadamente una cucharada. Al contrario del té verde, el té negro debe de infundirse con el agua recién hervida. Debe de permanecer en el agua 3-4 minutos. Dejarlo más tiempo, lo hace más amargo. Y si vas a agregar leche o mezclarlo con algo más, se recomienda infundir por 4-5 minutos.